David Noir abre las puertas a un mundo posible
La Provenza | Catherine Guizot | Pulsion
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La Provenza

Martes 22 de julio de 2003

Pulsiones

Los Inocentes

o 16 de nariz negra

Si le gustan las aventuras y no le importa cambiar de opinión sobre el teatro, debería ver la nueva obra de David Noir.

Con más delicadeza que en su obra anterior, David Noir aborda esta vez la infancia despreciada y ultrajada por la sociedad utilizando el delicado tema de la pedofilia. En una serie de secuencias, la docena de actores, que viven más que interpretan el texto leído al público, nos embarcan en una poderosa experiencia intelectual y emocional que saca al teatro de sus convencionalismos. Y, en efecto, los vemos a todos en escena en busca de su niño interior, el que aún no tiene todos los tabúes, en particular, por supuesto, los relativos a la sexualidad o a la muerte. Y se nota la influencia de Lars von Trier con sus Idiotas o Pasolini; no hay compromiso. Y la profunda desesperación de nacer en este mundo, en esta sociedad difícilmente transformable, tiñe toda la obra. David Noir abre las puertas a un mundo posible menos atado a ventajas ilusorias y más libre, con su cuerpo por ejemplo (los sucesos de los años 70 no están lejos).

Catherine GUIZOT

Todos los días a las 22.00 horas.

David Noir

David Noir, intérprete, actor, autor, director, cantante, artista visual, realizador de vídeo, diseñador de sonido, profesor... lleva su desnudez polimorfa y su infancia disfrazada bajo los ojos y oídos de cualquiera que quiera ver y oír.

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