En este momento estás viendo Journal des Parques J-11
Autonomía y supervivencia | "E la nave va" | Federico Fellini | 1983

Diario de los Parques J-11

Hacia la autonomía

¡Colocación!

Esta es la orden que me doy a mí mismo a un ritmo constante, día tras día, hora tras hora, tanto marinero como capitán a bordo de mi esquife.

El canal no es muy ancho. Incluso los más entendidos y comprensivos apenas pueden imaginar el escaso margen de maniobra para el convoy que supone un proyecto como éste. Parques de atracciones.

No digo esto para ser sensiblero, ni para que me compadezcan, que no me serviría de nada, ni siquiera como cataplasma para el alma. Un masaje concienzudo sería más eficaz, ya que la gratificación concreta es, la mayoría de las veces, mucho más regeneradora que un vago movimiento de compasión.

Lejos de mí identificar mi barco con una cocina. Estar atrapado en la agitación natural de los elementos no tiene nada que ver con el accidente. Un marinero no se considera en apuros por haber elegido embarcarse en una regata transatlántica. Sin embargo, esto no es un crucero y es esencial recordarlo y comentarlo regularmente, sobre todo para uno mismo, para no caer en el olvido y convertirse en un objeto flotante identificado pero insignificante en el océano.

No sé por qué -probablemente debido a nuestra estrechez de miras y al alcance tan limitado de nuestras preocupaciones individuales-, pero todos nosotros, por muy numerosos que seamos, olvidamos muy fácilmente lo que mueve a los demás. No es que no nos interese, sino que preferimos no saber demasiado de la vida cotidiana de los demás; que no nos resulte tan familiar. Esto, en mi opinión, explica en gran medida el éxito de las redes sociales como Facebook o Twitter, que nos permiten lanzar regularmente botellas de 5 ml al mar, sólo para hacer saber que la otra persona, el colega, el amigo, no ha naufragado, no se ha sumergido y ahogado en el oleaje. Es raro que en estas plataformas alguien exprese que está angustiado, lo que objetivamente no es mi caso.

Sin embargo, un diario también está destinado a dar testimonio de las realidades a medida que las atravesamos. No es realmente terapéutico y no es una alternativa al psicoanálisis; es más bien de carácter científico. El diario permite, además de la relación del viaje y la descripción de los descubrimientos, un relato de la evolución de su posición, la temperatura, la higrometría, la fuerza y la dirección del viento, medidos diariamente. Casualmente, o con una lógica etimológica lejana, es interesante observar que la segunda acepción de la palabra francesa "relación" en el sentido de relación humana, se traduce en "relationship" en inglés, donde barco significa estado o calidadSon los misterios poéticos del lenguaje los que, aunque las conexiones entre los términos resulten abusivas, constituyen sólidos puentes para la imaginación y la cristalización de un mundo del espíritu. Son los misterios poéticos del lenguaje que, aunque las conexiones entre los términos resulten abusivas, constituyen sólidos puentes para la imaginación y la cristalización de un mundo del espíritu. Toda la fuerza creativa de los juegos de palabras lo atestigua.

Así que para evitar el riesgo de fracaso, tenían que ser muy precisos. Recuerdo que me impresionó mucho, viendo la televisión, la precisión, el grado de colaboración y el método que los escluseros del Canal de Panamá tenían que demostrar todos los días, gracias al uso de pequeñas locomotoras, para arrastrar y mantener en línea buques de línea o portacontenedores de más de 100.000 toneladas, rozando los bordes del canal, con sus cascos a pocos centímetros del hormigón. No pretendo hacer un trabajo comparable al de un Titán por mi cuenta, pero sí la precisión de los malabares en todas sus formas, de modo que cada proyectil pase a gran velocidad -el tiempo es esencial- por un orificio apenas mayor que él, sin rozar nunca el perímetro. Es una pena que en la producción de proyectos ningún ajuste sea válido de una vez por todas y que haya que recalcular el ángulo de tiro para adaptarlo cada vez a las nuevas situaciones. No faltan situaciones de este tipo, y todas ellas son únicas en las formas que adoptan.

Me di cuenta de la importancia de gestionar todos los factores, sin excepción, cuando dejé de trabajar con empresas. No es que fueran modelos de sofisticación táctica, ni mucho menos. El vacío y las deficiencias en todas las posiciones hicieron que estos edificios fueran muy frágiles. Sólo el milagro de la energía colectiva soldada en un solo eje nos permitió romper muchas barreras y lograr más o menos nuestros objetivos. El único problema real fue el mismo cada vez; un problema, en mi opinión, de carácter artístico: escapar del cabotaje (no confundir con el la presentación de la informaciónTodos ellos son excelentes intérpretes; los que tienen menos experiencia lo compensan con sus ventajas personales puestas al servicio de una buena inteligencia escénica).

Para dejar la costa, pero ¿para ir a dónde? El mar abierto, la aventura humana en la que el deseo de embarcarse juntos suplantaría la necesidad de seguridad, tanto emocional como material, buscada en otros lugares. La autarquía y la bucanería eran mis aspiraciones más profundas y mis consignas en aquel momento. Un día sentí que la máquina se agarrotaba, se tensaba por así decirlo, como reacción a mis discursos y decidí abandonar el barco. Por muy valiente que pareciera, ahora, a mis ojos, ya estaba siendo devorada por las termitas. Nadie en particular fue la causa, simplemente nuestros caminos se separaron debido a las diferentes ambiciones.

Desde entonces he sabido -y lo supe desde aquellos momentos- que mi deseo de hacer teatro, que entonces se percibía, creo, como comunicativo y abierto, se percibiría en lo sucesivo como severo e intolerante con aquellos que, aun aceptando participar en él, rechazaran ciertos aspectos de mi visión de las cosas. Había acostumbrado a mis compañeros a una visión mucho más amplia. Cada uno es libre, por supuesto, pero lamento que hoy, a la pregunta "¿Por qué elegirnos?", responda "¿Por qué formar parte?

Ya sea un malentendido fundamental o un malentendido perjudicial, en ese momento no dejé un muelle amistoso con vistas al mar abierto, sino un deseo de expansión que encontró su límite en el juego con un velero en miniatura en la cuenca del jardín de Luxemburgo. Prefería reservar estas emocionantes aventuras para mis futuros días de regresión en la cama.

Sin embargo, este aparente cambio de rumbo fue sólo superficial.

Nunca he tenido más que una búsqueda, para conseguir lo que quiero de la manera que quiero. Si me veo obligado a transigir, suelto amarras por otros cielos, triste pero coherente con mi deseo de autonomía.

Recientemente he aprendido sobre el desarrollo personal, que autonomía difiere de independenciaEsto se debe a que implica la expresión de la necesidad de ayuda de los demás, mientras que la segunda es simplemente un intento de liberarse de las propias cadenas. Este interesante comentario me hizo pensar mucho. El resultado de esta reflexión es que actualmente no disfruto de ninguna de las dos cosas. No disfrutar de ellos no significa que no se tenga acceso a ellos. De hecho, es exactamente lo contrario. Si no tuviera ninguna ambición de "desbordamiento" artístico, sería, tanto como cualquiera puede serlo en el contexto de la vida moderna, independiente y autónomo. Sólo un deseo fuera de la caja, apuntando precisamente a la adquisición de absoluto de estos estados, obliga a poner las ganancias en la mesa. Una esperanza tonta de que le toque el premio gordo y se rompa la caja, pero esperanza al fin y al cabo, que en mi opinión es mejor que no tener ninguna esperanza, aparte de gestionar el pequeño negocio de afectos y bienes materiales.

Soy muy consciente de los riesgos que conllevan estos desafíos. Estamos demasiado acostumbrados a identificar el arte por los raros ejemplos, a ojos de la historia, que han salido indemnes e incluso a veces afortunados. La mayoría nunca experimenta este glorioso resultado. El aislamiento y la relativa falta de vivienda son la suerte común de los actores del sector en cuestión. Las ilusiones en este ámbito son perjudiciales.

Entonces, "al precio que cuesta", como diría el otro, pues sí, Exijo, (se lanza el feo verbo caprichoso, complemento de su noble sustantivo, "exigencia", componiendo así uno de los binomios más ambivalentes) no es que uno se apropie de mi camino como fiel, sino que se dé los medios para entender los entresijos, que no sea a la luz de su propio prisma personal, si quiere ayudarme. No pido más que el esfuerzo no fingido de esta comprensión. Este es el contenido de mi deseo de autonomía; en esta medida pido ayuda. Después, cada persona hará según su corazón si la naturaleza de lo que ha entendido de mi enfoque resuena en su interior, un cierto eco a su propia vida y deseo de arte.

Para continuar...

David Noir

David Noir, intérprete, actor, autor, director, cantante, artista visual, realizador de vídeo, diseñador de sonido, profesor... lleva su desnudez polimorfa y su infancia disfrazada bajo los ojos y oídos de cualquiera que quiera ver y oír.

Esta entrada tiene 5 comentarios

  1. Torres

    Siempre ha habido, desde tiempos inmemoriales hasta hoy, quienes están "al margen, fuera, en el margen", llámense poetas o soñadores o disidentes o performers.

    Sólo gente que no piensa como debería pensar.

    Tú eres uno de ellos.
    Me alegro de poder seguirle, si no acompañarle.

    pH

    1. David Noir

      Gracias por incluirme en esta lista y por formar parte del viaje
      Hasta pronto

  2. Patrick Speck

    Sí, uno puede perfectamente ir en la misma dirección y ser completamente Independiente, y, por este hecho volver atrás o tomar otra dirección en otro momento....pero generalmente cuando uno sabe a dónde va, (al menos, la dirección) y cuando uno sabe por qué va allí.... ¿no decimos que todos los "caminos llevan a Roma" (no por las mismas razones en cualquier caso) Lo principal es no sentirse nunca "obligado" .....Finalmente es muy simple? ¿No?

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.