Material(es) sobre el que se reflexionará
Una experiencia para compartir, al final más sencilla de lo que parece.
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Querido teatro de moda, no esperé a que hicieras del sexo y la desnudez mi caballo de batalla. Los cuerpos desnudos y los míos en primer lugar son las herramientas y la inspiración de mi vida y mi trabajo. La noción de "sexo lúdico" implica considerar el propio aparato genital y todo el cuerpo erótico como un juguete con el que, como hacemos de niños con nuestras marionetas y, una vez adultos, con nuestras parejas, es probable que nos inventemos historias. Ahí lo tienes.
Aquí el teatro se vacía de su sustancia para guardar sólo la envoltura y este corazón cansado es reemplazado por un deseo libre orgánico y cibernético, más acorde con nuestros tiempos desprovistos de angustia y temas.
Aquí construyo mi refugio, mi castillo, mi tumba, mi reclusión, mi cloaca, mi reino, mi cabeza, mi bestia, mi cuerpo... toda la panoplia de mis materiales de pensamiento. Improvisando cada día, equipo mi frágil Nautilus desde dentro...
...sólo para construirme en el escenario
Aquí la burla está ahí para expresar el odio de los adoradores. Los que creen en incensar más allá de la realidad, a su infante, a su padre, a su madre, a sus modelos, a sus ídolos. Sin saberlo, dan forma a la fuente del mal. De todo el mal que existe en este mundo; ese cuyo origen es la esperanza en la existencia de seres "superiores", mundos superiores, lugares de sueños que dan cabida a otra vida. Es la esperanza en toda su morbosidad. Es el ancla de toda vanidad y desprecio. La envidia y la admiración morbosa están perpetuamente correlacionadas.
